Contrata siempre que viajes, para todas las personas que viajan contigo y hazlo con anticipación. Si compras en el aeropuerto, puedes llegar pagar más de lo necesario. Si compras cuando ya estás en tu viaje vas a tener algunos días sin cobertura antes de que se active tu plan.

La cobertura que necesitas puede depender del destino. Hay países que te solicitan una cobertura mínima para poder ingresar. También hay países dónde la atención médica es muy costosa por lo que lo mejor sería tener la cobertura más completa. Cuéntale a tu asesor a que países viajas para que te asesore sobre la cobertura.

Cuéntale a tu asesor cuáles son tus planes o actividades durante el viaje. Cuáles son los destinos y cada cuanto viajas. Puedes ahorrar mucho dinero si eres un viajero frecuente y compras el producto adecuado.

La compañía tiene una red de doctores y hospitales a los que el paciente puede acudir. Es mejor avisar a tu asesor cuando necesites la cobertura para que te guíe a los lugares dónde tienes cobertura. Si por emergencia tienes que acudir al lugar más cercano lo puedes hacer.

Si te vas a vivir en otro país de manera permanente, es mejor contratar un seguro médico en el país dónde vas a vivir. Puedes contratar un seguro de viaje por un tiempo hasta que puedas establecerte y contratar una póliza en el país dónde vas a vivir.

Los seguros de viajes también tienen límites dentro de sus coberturas. Te recomendamos fijarte en los límites de las siguientes coberturas:

– Cobertura para enfermedades pre-existentes

– Odontología

– Medicamentos ambulatorios

– Práctica de deportes

– Embarazo (Monto y hasta que semana cubre)

– Prótesis

– Gastos de hotel o cambios de pasaje en caso de enfermedad o accidente

– Perdida o demora de equipaje

– Límite de edad para las coberturas y beneficios